“EL AMOR ESTIMULA LA INVENTIVA”
Es una verdad a la cual Gabriel Arias atribuye su descubrimiento: Colocar un tornillo en el sitio del pinchazo mientras se consulta al experto en cauterización para que repare la llanta con la tecnología apropiada.
Gabriel ama las llantas y por eso las mima, las estudia, las remienda, las mejora y las salva, desde hace más de cincuenta años. Es un sentimiento profundo.
Esto le ha ganado el respeto de los ingenieros y distribuidores de Icollantas y Michelin, quienes lo consideran un símbolo, es su amor el que le induce a realizar verdaderos milagros en el campo de la recuperación de llantas y ha hecho conocido el nombre de Clinica de Llantas en los prestigiosos laboratorios del mundo. Ahora ese afecto especial lo inspiró para crear:
“El método del tornillo”, cuyo principal objetivo es garantizar la seguridad de los conductores.
“Las llantas son el colchón de su vehículo, su seguridad y la de su familia.”
Cuando llegue a su montallantas, pida que le instalen el tornillo goloso que le obsequian en Clínica de Llantas, en cambio del taco que arruinará su llanta.
“Siempre le saldrá más barato pues ha salvado su llanta de manos inexpertas”
Seis tornillos golosos de diferente tamaño y diámetro para que en caso de pinchazo usted se desvaré prontamente sin correr riesgos y le protege su inversión.
Las leznas usadas para perforar la llanta al colocar los tacos, rompen las carcazas y agrandan el orificio dejado por el objeto que ocasiona el pinchazo, además el sistema tradicional implica tiempo y dependencia de un operario especializado en esta labor.
El método del tornillo no requiere desplazamiento, sino un kit de corazón.
Su instalación se puede realizar con amor y la paciencia necesaria para atornillar cuidadosamente en el lugar del pinchazo el tornillo adecuado sin necesidad de desmontar la llanta en el menor tiempo posible y solamente perdiendo media libra de aire. Una vez termine la sencilla operación antes descrita usted puede continuar su camino, con la seguridad de que llegará sin contratiempo a su destino:
Su CLINICA DE LLANTAS